¿A que jamás te irías de vacaciones dejándote una ventana abierta? En Internet, nuestra navegación nunca está libre de riesgos y en cualquier parte de la red puede acechar una trampa. Robo de contraseñas, de datos bancarios o suplantaciones de identidad están a la orden del día.
Este 7 de febrero se celebra el Día de Internet seguro o Safer Internet Day #SID2023, en esta edición bajo el lema ‘Juntos por un Internet mejor (Together for a better internet)’.
El evento internacional está organizado por la red INSAFE/INHOPE de Centros de Seguridad en Internet en Europa, con el apoyo de la Comisión Europea. Esta iniciativa se realiza cada febrero para promover el uso seguro y positivo de la tecnología, especialmente entre niños y jóvenes. Pero ningún usuario está a salvo; los mayores resultan igualmente vulnerables.
Por eso, los Agatares te ofrecemos hoy una serie de tips para que tu uso de Internet sea lo más seguro posible.
- Comprar con seguridad: ¿Recuerdas qué fue lo primero que compraste por Internet? ¿Te han timado alguna vez? El comercio electrónico está a la orden del día y también las estafas. El primer consejo para no hacer el primo pasa por comprobar que el sitio es seguro y que sabe manejar correctamente nuestros datos. Busca en la url el símbolo de un candado o la cadena https para corroborar que se trata de una página de confianza. Al pagar, es mejor utilizar tarjetas recargables o medios que no estén directamente enlazados con nuestro banco, como Paypal. Y algo básico: no te fíes de cualquier vendedor.
- Ten un buen antivirus: Están por todas partes y, sobre todo, buscan robar tus datos. Los virus informáticos se atajan con un buen antivirus. No seas agarrado e invierte en un programa de calidad.
- Evita las redes públicas: Es verdad que ya hay wifi gratis por todos sitios. Pero puede ser un regalo envenenado. Las redes públicas, al permitir la entrada de muchos usuarios, son más vulnerables a los ataques. Lo barato puede salirte caro. Si no tienes más remedio que usarla porque vas tieso de datos, evita entrar a la aplicación del banco o cualquier otra que maneje información sensible.
- No abras cualquier mail: El burdo mensaje de que te está esperando una herencia de 20 millones de dólares sigue vigente. También el del archivo adjunto que infecta el ordenador o tu móvil o el de tu falsa compañía de la luz que te pide que actualices tus datos. Ojito con los remitentes y en caso de duda, contacta por teléfono con la compañía.
- Aumenta la seguridad de tus contraseñas: 123456 se la sabe hasta el gato. Procura que tus contraseñas tengan al menos una letra en mayúscula, un número y un símbolo. Y evita repetirla en todos los sitios.
- Actualiza tus dispositivos: ¿Que aún tienes Windows 7? Y ya no solo en tu ordenador. Actualiza también el software de tu teléfono, la pulsera de actividad y, en resumen, todo lo actualizable. Serán más seguros frente a ataques informáticos.
- No informes de tu geolocalización: Si no es imprescindible, no tengas activada la geolocalización en tu móvil de forma permanente. Nadie tiene por qué saber dónde estás en todo momento; es una información demasiado sensible y que se suele compartir sin darnos cuenta.
- Evita los ordenadores públicos: Y si no hay más remedio que usarlos, procura entrar con sesiones del navegador en modo oculto o discreto. Añade la doble verificación de identidad allá donde sea posible.
- Cuidado con las redes sociales: No todo lo que se publica en redes sociales está verificado por el propietario de la red. Otra jungla de virus espera junto a los inocentes vídeos de gatitos.
- Educa en la prevención y se ejemplo para tus hijos: No les dejes solos navegando por Internet e instala programas específicos para la seguridad infantil en la red. Son usuarios muy vulnerables
Ya sabes, ante la menor duda en Internet, lo más sensato es cerrar la ventana. El sentido común es la mejor guía para disfrutar de todo lo que se ofrece en el ciberespacio.
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